San José, 21 may (EFE).- El mexicano Glen Cerda Guajardo, quien asegura que estuvo el pasado 1 de marzo en un campamento de las FARC en Ecuador durante un ataque del Ejército colombiano, en el que murió alias "Raúl Reyes", afirmó hoy en Costa Rica, que hubo una persecución y fuego cruzado en esa operación.
En una entrevista telefónica con Efe, Cerda aseguró que el día del ataque estaba en "la tercera hilera", a unos 300 metros del campamento de "Raúl Reyes", junto a 23 mexicanos más "conociendo desde adentro la situación" de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
"Hay cosas que no se han dicho. Por ejemplo, hubo respuesta de las FARC, hubo fuego cruzado, hubo una persecución y también hubo asesinatos frente a frente, con tiro de gracia, a personas que lograron sobrevivir al ataque", expresó el mexicano.
Cerda, quien dijo no poder profundizar en sus declaraciones por recomendación del Consulado mexicano, está detenido en Costa Rica en un centro para inmigrantes por haber ingresado ilegalmente a este país y será deportado a México mañana.
"Le debo mi vida a las FARC porque personas de las FARC nos salvaron. A compañeros míos y a mí nos hicieron salir de Ecuador, algunos a Colombia, otros a Venezuela y yo hasta Panamá", relató el mexicano, quien dijo ser profesor de ajedrez.
"Soy socialista y participo en círculos bolivarianos en el continente pero nunca he participado en las FARC, ni en ninguna de sus células en Mesoamérica como han dicho algunos medios de que yo soy guerrillero", dijo.
Según Cerda, en su estadía en el campamento de la guerrilla colombiana en territorio ecuatoriano pudo entrevistarse con "Raúl Reyes", "número dos" de esa guerrilla, pero reiteró que no puede ahondar en detalles.
Sobre su captura en Costa Rica el pasado 11 de mayo, manifestó que se encontraba de paso por este país, ya que se dirigía hacia Nicaragua donde le interesaba solicitar refugio.
Por su parte, el director de Migración de Costa Rica, Mario Zamora, declaró a Efe el martes que Cerda ya había sido deportado del país en dos ocasiones por ingreso ilegal y aseguró que se le está llevando un proceso "estrictamente migratorio".
Sobre la presencia del mexicano en el campamento de las FARC, Zamora comentó que "no nos ha dado una sola evidencia de lo que él afirma, por lo que su situación se valora estrictamente desde el punto de vista de migración".
Hasta el momento, el funcionario no ha sido contactado por autoridades mexicanas, ni tampoco ha recibido ninguna alerta internacional sobre el mexicano.
Cerda dijo que perteneció a la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y afirmó que estaba en Ecuador en una "cumbre bolivariana" donde, según él, recibieron una invitación del líder guerrillero.
mayo 21, 2008
¿Quién puede ser el candidato del PAN?
Ciro Gómez Leyva
La historia en breve
Milenio
Para bien, para mal, Andrés Manuel López Obrador puso en marcha el prólogo del capítulo 2012 de ese perverso y a la vez fascinante juego de la política mexicana que es la sucesión presidencial.
El lunes dijo en entrevista con La Voz de Michoacán que apoyaría a Marcelo Ebrard, Lázaro Cárdenas o a “cualquier otro compañero mejor posicionado”. Ebrard le entró al lance y respondió de bote pronto que a él no lo den por muerto.
El PRD, el FAT o lo que se entienda por izquierda tendría ya a sus tres primeros “posibles”: el jefe de Gobierno del DF, el ex gobernador de Michoacán y el propio López Obrador. Habrá quien agregue a la zacatecana Amalia García. Como sea, traen una buena baraja; mejores candidatos que partido.
Con Enrique Peña Nieto, Manlio Fabio Beltrones, Beatriz Paredes y al menos una tercia de gobernadores, el PRI tiene también más cartas de las que tuvo en 2000 (Francisco Labastida, Roberto Madrazo, Manuel Bartlett) y 2006 (Madrazo, Arturo Montiel, Enrique Jackson). Figuras no le faltarán esta vez al tricolor.
Otra es la historia del PAN. Juan Camilo Mouriño parece estar liquidado para esa misión: el escrutinio público es severo y difícilmente podrá remontar su terrible experiencia del primer semestre de 2008. Quedarían Germán Martínez, Josefina Vázquez Mota, Ernesto Cordero y quizá algún gobernador que aún no pinta en el mapa nacional. Con todo respeto, una caballada muy flaca para lo que pueden presumir priistas y perredistas.
Falta mucho, claro, pero hace seis años ya se apuntaba a Madrazo, López Obrador y Santiago Creel. Nadie, es cierto, hablaba del diputado Felipe Calderón. ¿Tiene el PAN de hoy a un Calderón?
gomezleyva@milenio.com
La historia en breve
Milenio
Para bien, para mal, Andrés Manuel López Obrador puso en marcha el prólogo del capítulo 2012 de ese perverso y a la vez fascinante juego de la política mexicana que es la sucesión presidencial.
El lunes dijo en entrevista con La Voz de Michoacán que apoyaría a Marcelo Ebrard, Lázaro Cárdenas o a “cualquier otro compañero mejor posicionado”. Ebrard le entró al lance y respondió de bote pronto que a él no lo den por muerto.
El PRD, el FAT o lo que se entienda por izquierda tendría ya a sus tres primeros “posibles”: el jefe de Gobierno del DF, el ex gobernador de Michoacán y el propio López Obrador. Habrá quien agregue a la zacatecana Amalia García. Como sea, traen una buena baraja; mejores candidatos que partido.
Con Enrique Peña Nieto, Manlio Fabio Beltrones, Beatriz Paredes y al menos una tercia de gobernadores, el PRI tiene también más cartas de las que tuvo en 2000 (Francisco Labastida, Roberto Madrazo, Manuel Bartlett) y 2006 (Madrazo, Arturo Montiel, Enrique Jackson). Figuras no le faltarán esta vez al tricolor.
Otra es la historia del PAN. Juan Camilo Mouriño parece estar liquidado para esa misión: el escrutinio público es severo y difícilmente podrá remontar su terrible experiencia del primer semestre de 2008. Quedarían Germán Martínez, Josefina Vázquez Mota, Ernesto Cordero y quizá algún gobernador que aún no pinta en el mapa nacional. Con todo respeto, una caballada muy flaca para lo que pueden presumir priistas y perredistas.
Falta mucho, claro, pero hace seis años ya se apuntaba a Madrazo, López Obrador y Santiago Creel. Nadie, es cierto, hablaba del diputado Felipe Calderón. ¿Tiene el PAN de hoy a un Calderón?
gomezleyva@milenio.com
El Carnal ya está en el ring
Carlos Marín
El Asalto a la Razón
Milenio
Sin empacho, Marcelo Ebrard admite una obviedad que había estado conteniendo: quiere suceder a Felipe Calderón.
Apto y equipado para intentar alzarse con el mayor Poder, no se hace el muerto: “Estoy vivo y trabajando”, dice (lo cual, por cierto y con fruición, hace también otro probable: Enrique Peña Nieto).
López Obrador dice que a Ebrard o a Lázaro Cárdenas pudiera dar su respaldo en 2012… si ve a uno u otro más arriba que él.
Sin embargo, el ex gobernador de Michoacán carece del magnífico escenario (y los recursos de todo género) que el defeño tiene para lucirse, a lo que vale añadir su valiosa (pero muy cuidada) cercanía con López Obrador.
Es ante todo eficaz al frente de una Ciudad de México maravillosa y atroz, lo cual no se atreven a escamotearle panistas ni priistas, incluido el mismísimo Carlos Salinas de Gortari.
Si bueno es que El Carnal ya no esconda lo evidente, mucho más que bueno se confirma será el espectáculo del desgreñadero que viene.
cmarin@milenio.com
El Asalto a la Razón
Milenio
Sin empacho, Marcelo Ebrard admite una obviedad que había estado conteniendo: quiere suceder a Felipe Calderón.
Apto y equipado para intentar alzarse con el mayor Poder, no se hace el muerto: “Estoy vivo y trabajando”, dice (lo cual, por cierto y con fruición, hace también otro probable: Enrique Peña Nieto).
López Obrador dice que a Ebrard o a Lázaro Cárdenas pudiera dar su respaldo en 2012… si ve a uno u otro más arriba que él.
Sin embargo, el ex gobernador de Michoacán carece del magnífico escenario (y los recursos de todo género) que el defeño tiene para lucirse, a lo que vale añadir su valiosa (pero muy cuidada) cercanía con López Obrador.
Es ante todo eficaz al frente de una Ciudad de México maravillosa y atroz, lo cual no se atreven a escamotearle panistas ni priistas, incluido el mismísimo Carlos Salinas de Gortari.
Si bueno es que El Carnal ya no esconda lo evidente, mucho más que bueno se confirma será el espectáculo del desgreñadero que viene.
cmarin@milenio.com
Andres, candidato
Joaquín López-Dóriga
En privado
Milenio
Cuando el delito que nadie quería ver se descubre, resulta que todos lo habían visto. Florestán
Lo que Andrés Manuel López Obrador declaró a La Voz de Michoacán y MILENIO publicó ayer, ya se lo había escuchado de cercanos a Marcelo Ebrard que se lo atribuían a él mismo: si llegado el momento éste va arriba en las encuestas, aquél le dejará la candidatura presidencial del PRD en 2012.
Mmmjá, me dije.
¿Sabe usted cuándo AMLO va a reconocer ir abajo en una encuesta o que un sondeo lo derrotó? ¡Nunca! Eso no es lo suyo.
Esta declaración en Morelia es el lanzamiento de su campaña presidencial, una reedición del que me den por muerto, que repitió durante cinco años desde el Gobierno capitalino, cuando estaba más vivo que nunca y operando en ese único sentido: la Presidencia.
Lo interesante es que parece haber vendido a Marcelo, y éste comprado, la idea de que sí, que si las encuestas no lo favorecen, se hará a un lado para apoyarlo, y aquél, confiado, lo repite.
Pero ahora le metió un factor de presión: Lázaro Cárdenas. En Morelia, dijo que apoyaría al ex gobernador de Michoacán, de estar, otra vez, a la cabeza de las encuestas y llegar, así, a la candidatura presidencial del PRD, lo que choca con el pasado reciente, en el que lo hostigó al punto de fomentar que, en el Zócalo, los suyos le gritaran traidor a él y a su padre, con el que rompió y ahora le pide olvidar lo que él mismo provocó: bipolaridad en la que le reconoce sus críticas a la reforma energética, pero no las que hace al PRD y al lopezobradorismo.
En fin, que López Obrador remasteriza su estrategia rumbo a la Presidencia en 2012, buscando distraer lo que logrará con los ingenuos o los otros. Está en su derecho.
Lo interesante sería ver si, en el remotísimo caso de que él declinara y Ebrard, o Cárdenas como dice, fuera el candidato del PRD, ellos le aceptarían su apoyo electoral, pues antes habría de sopesar si éste le sumaría o le restaría, toda vez que ya vimos que lo suyo no es endosar popularidad.
Retales
1. HERALDOS.- Los cambios en la oficina de Comunicación Social de Marcelo Ebrard fueron miel para los bolsillos del editor de la Doctores. Su operadora de siempre lo es ahora de Marcelo con presupuesto libre y apuntado al financiamiento del empresario de radio en aprietos, que con esto y la indulgencia plenaria de gobierno, pues ya no;
2. GOBER FUTBOLERO.- La oficina del gobernador de Guanajuato envió fotos de su irrupción en Culiacán en el triunfo del León ante los Dorados, lo que registró José Antonio García, quien declaró que el equipo se irá para que Juan Manuel Oliva lo compre, y caro. Le podría ir como a Fidel con los Tiburones; y
3. HOMBRECITO.- Más que cuatro años, lo que esperó fue el paso de la campaña presidencial, no le fuera a afectar, para reconocer ahora, lo que solo él quiso desconocer.
Nos vemos mañana, pero en privado.
lopezdoriga@milenio.com
En privado
Milenio
Cuando el delito que nadie quería ver se descubre, resulta que todos lo habían visto. Florestán
Lo que Andrés Manuel López Obrador declaró a La Voz de Michoacán y MILENIO publicó ayer, ya se lo había escuchado de cercanos a Marcelo Ebrard que se lo atribuían a él mismo: si llegado el momento éste va arriba en las encuestas, aquél le dejará la candidatura presidencial del PRD en 2012.
Mmmjá, me dije.
¿Sabe usted cuándo AMLO va a reconocer ir abajo en una encuesta o que un sondeo lo derrotó? ¡Nunca! Eso no es lo suyo.
Esta declaración en Morelia es el lanzamiento de su campaña presidencial, una reedición del que me den por muerto, que repitió durante cinco años desde el Gobierno capitalino, cuando estaba más vivo que nunca y operando en ese único sentido: la Presidencia.
Lo interesante es que parece haber vendido a Marcelo, y éste comprado, la idea de que sí, que si las encuestas no lo favorecen, se hará a un lado para apoyarlo, y aquél, confiado, lo repite.
Pero ahora le metió un factor de presión: Lázaro Cárdenas. En Morelia, dijo que apoyaría al ex gobernador de Michoacán, de estar, otra vez, a la cabeza de las encuestas y llegar, así, a la candidatura presidencial del PRD, lo que choca con el pasado reciente, en el que lo hostigó al punto de fomentar que, en el Zócalo, los suyos le gritaran traidor a él y a su padre, con el que rompió y ahora le pide olvidar lo que él mismo provocó: bipolaridad en la que le reconoce sus críticas a la reforma energética, pero no las que hace al PRD y al lopezobradorismo.
En fin, que López Obrador remasteriza su estrategia rumbo a la Presidencia en 2012, buscando distraer lo que logrará con los ingenuos o los otros. Está en su derecho.
Lo interesante sería ver si, en el remotísimo caso de que él declinara y Ebrard, o Cárdenas como dice, fuera el candidato del PRD, ellos le aceptarían su apoyo electoral, pues antes habría de sopesar si éste le sumaría o le restaría, toda vez que ya vimos que lo suyo no es endosar popularidad.
Retales
1. HERALDOS.- Los cambios en la oficina de Comunicación Social de Marcelo Ebrard fueron miel para los bolsillos del editor de la Doctores. Su operadora de siempre lo es ahora de Marcelo con presupuesto libre y apuntado al financiamiento del empresario de radio en aprietos, que con esto y la indulgencia plenaria de gobierno, pues ya no;
2. GOBER FUTBOLERO.- La oficina del gobernador de Guanajuato envió fotos de su irrupción en Culiacán en el triunfo del León ante los Dorados, lo que registró José Antonio García, quien declaró que el equipo se irá para que Juan Manuel Oliva lo compre, y caro. Le podría ir como a Fidel con los Tiburones; y
3. HOMBRECITO.- Más que cuatro años, lo que esperó fue el paso de la campaña presidencial, no le fuera a afectar, para reconocer ahora, lo que solo él quiso desconocer.
Nos vemos mañana, pero en privado.
lopezdoriga@milenio.com
¿Marcelo, candidato?
Francisco Garfias
Arsenal
exonline.com
¿Para cuándo construirá la línea que va a Los Pinos?, preguntamos a Marcelo Ebrard apenas terminó la presentación de lo que será la Línea 12 del Metro (Tláhuac-Mixcoac), pomposamente llamada “del Bicentenario”. El jefe de Gobierno del DF respondió, de bote pronto: “Precisamente por eso, para que no especulen, se construirá (la Línea 12) en el otro extremo de la ciudad”. A Marcelo, sin embargo, le bastó un segundo de reflexión para, muy sonriente, precisar el tiro: “Pero vamos a construir un ramal…”
La pregunta inicial venía al caso. La víspera, Andrés Manuel López Obrador admitió, en entrevista con La Voz de Michoacán, que no siempre va a ser candidato presidencial. Tampoco descartó dar su respaldo a Marcelo Ebrard o Lázaro Cárdenas. “Falta mucho, pero desde ahora te puedo decir que voy a apoyar al que esté mejor posicionado que yo en 2012. A mí me están golpeando mucho, el régimen no me quiere…”, dijo el legítimo.
A López Obrador, sin embargo, no hay que creerle mucho. Alguna vez ya nos dijo: “A mí, que me den por muerto”, y todos sabemos lo que pasó después.
Ebrard encabezó la presentación del proyecto de la “Línea del Bicentenario”. Lo ubicó como la obra más ambiciosa de su sexenio. Costará alrededor de 20 mil millones de pesos. “¿Por qué invertir tanto?”, se preguntó. Él mismo respondió: “De todos los programas para amortiguar las desigualdades, el Metro es el instrumento más eficaz”.
Sus palabras tienen sentido. No hay duda de que es el transporte que más beneficios aporta a quienes menos tienen. ¿Por qué entonces el gobierno de López Obrador, cuyo lema era “primero los pobres”, no construyó un centímetro de Metro? Es pregunta.
La Línea 12 transportará alrededor de 400 mil usuarios; va a reducir, de dos horas a 45 minutos, el recorrido Tláhuac-Centro; bajará el gasto por transporte, de 13.50 a cuatro pesos diarios. Le van a poner sanitarios, sistema braille, sistemas auditivos… La licitación pública internacional está en curso. El fallo es para el 5 de junio. Las obras se iniciarán en julio próximo y van a culminar, en su totalidad, a finales de 2011. El tramo Tláhuac-Axomulco estará listo a finales de 2010.
n “Me están mostrando como lo que soy: un regiomontano austero, que a menudo come hamburguesas en vez de ir a restaurantes de lujo”, dice a este espacio Agustín Basave, al comentar las versiones en el sentido de que, durante su gestión como secretario técnico de la CENCA, se utilizó dinero del erario para financiar “botanas”. El hombre jura que, antes de que él llegara a la secretaría técnica, se gastaban entre 40 mil y 80 mil pesos al mes en comidas, “en la mía eran tres mil pesos al mes”, subraya.
“Afirmar que se gastaron ‘varios millones’ en compras de cacahuates, analgésicos y boletos de Metro es tan falso como ridículo”, asegura Basave. Y se pregunta: “¿Cuántas bolsas de cacahuates, cajas de aspirinas o viajes en Metro se necesitaría comprar, para llegar a ‘varios millones de pesos’?” También califica de “mentira” las versiones de que ya le pidieron explicaciones en la Cámara de Diputados.
“Le ahorré al erario poco menos de 20 millones de pesos (pronto se sabrá la cantidad exacta), de los 79 originalmente asignados. Todo el mundo sabe de qué lado estuvo el dispendio y de qué lado la austeridad”, señala.
Como ejemplo manifiesta que, en la primera etapa de la CENCA —la de su predecesor, Alberto Aguilar Iñárritu—, se imprimieron cuatro volúmenes de las memorias y, en la segunda, fueron seis. “En los primeros gastaron 6.7 millones (97 pesos cada ejemplar.) En los que yo mandé hacer, sólo 363 mil (30 pesos el ejemplar), con mejor calidad de papel e impresión y con Talleres Gráficos”, puntualiza.
n Una desproporcionada reacción provocó la nota sobre el reconocimiento de Constanza, la hija de Santiago Creel y Edith González, casi cuatro años después de nacida. Al mediodía de ayer, más de dos mil impactos en internet se registraban ya en la página del Senado y el panista había realizado siete enlaces en vivo con distintas radiodifusoras, según datos de comunicación social de la Cámara alta. Las solicitudes de entrevista eran tantas que podían compararse con las que se le pidieron a Luis Miguel por la presentación de su más reciente disco.
Creel hizo una brevísima declaración sobre el tema. “He reconocido que Constanza es mi hija. Aquí, con ustedes, quiero dar la cara de ello. También quiero pedirles su comprensión para que se respete el derecho a la vida privada de mi hija. Hemos convenido Edith y yo en no dar más declaraciones sobre este asunto”, dijo el presidente del Senado. La tardanza para reconocer a la hija ha servido para que sus enemigos golpeen políticamente al panista, pero en este espacio pensamos que “más vale tarde que nunca.”
Arsenal
exonline.com
¿Para cuándo construirá la línea que va a Los Pinos?, preguntamos a Marcelo Ebrard apenas terminó la presentación de lo que será la Línea 12 del Metro (Tláhuac-Mixcoac), pomposamente llamada “del Bicentenario”. El jefe de Gobierno del DF respondió, de bote pronto: “Precisamente por eso, para que no especulen, se construirá (la Línea 12) en el otro extremo de la ciudad”. A Marcelo, sin embargo, le bastó un segundo de reflexión para, muy sonriente, precisar el tiro: “Pero vamos a construir un ramal…”
La pregunta inicial venía al caso. La víspera, Andrés Manuel López Obrador admitió, en entrevista con La Voz de Michoacán, que no siempre va a ser candidato presidencial. Tampoco descartó dar su respaldo a Marcelo Ebrard o Lázaro Cárdenas. “Falta mucho, pero desde ahora te puedo decir que voy a apoyar al que esté mejor posicionado que yo en 2012. A mí me están golpeando mucho, el régimen no me quiere…”, dijo el legítimo.
A López Obrador, sin embargo, no hay que creerle mucho. Alguna vez ya nos dijo: “A mí, que me den por muerto”, y todos sabemos lo que pasó después.
Ebrard encabezó la presentación del proyecto de la “Línea del Bicentenario”. Lo ubicó como la obra más ambiciosa de su sexenio. Costará alrededor de 20 mil millones de pesos. “¿Por qué invertir tanto?”, se preguntó. Él mismo respondió: “De todos los programas para amortiguar las desigualdades, el Metro es el instrumento más eficaz”.
Sus palabras tienen sentido. No hay duda de que es el transporte que más beneficios aporta a quienes menos tienen. ¿Por qué entonces el gobierno de López Obrador, cuyo lema era “primero los pobres”, no construyó un centímetro de Metro? Es pregunta.
La Línea 12 transportará alrededor de 400 mil usuarios; va a reducir, de dos horas a 45 minutos, el recorrido Tláhuac-Centro; bajará el gasto por transporte, de 13.50 a cuatro pesos diarios. Le van a poner sanitarios, sistema braille, sistemas auditivos… La licitación pública internacional está en curso. El fallo es para el 5 de junio. Las obras se iniciarán en julio próximo y van a culminar, en su totalidad, a finales de 2011. El tramo Tláhuac-Axomulco estará listo a finales de 2010.
n “Me están mostrando como lo que soy: un regiomontano austero, que a menudo come hamburguesas en vez de ir a restaurantes de lujo”, dice a este espacio Agustín Basave, al comentar las versiones en el sentido de que, durante su gestión como secretario técnico de la CENCA, se utilizó dinero del erario para financiar “botanas”. El hombre jura que, antes de que él llegara a la secretaría técnica, se gastaban entre 40 mil y 80 mil pesos al mes en comidas, “en la mía eran tres mil pesos al mes”, subraya.
“Afirmar que se gastaron ‘varios millones’ en compras de cacahuates, analgésicos y boletos de Metro es tan falso como ridículo”, asegura Basave. Y se pregunta: “¿Cuántas bolsas de cacahuates, cajas de aspirinas o viajes en Metro se necesitaría comprar, para llegar a ‘varios millones de pesos’?” También califica de “mentira” las versiones de que ya le pidieron explicaciones en la Cámara de Diputados.
“Le ahorré al erario poco menos de 20 millones de pesos (pronto se sabrá la cantidad exacta), de los 79 originalmente asignados. Todo el mundo sabe de qué lado estuvo el dispendio y de qué lado la austeridad”, señala.
Como ejemplo manifiesta que, en la primera etapa de la CENCA —la de su predecesor, Alberto Aguilar Iñárritu—, se imprimieron cuatro volúmenes de las memorias y, en la segunda, fueron seis. “En los primeros gastaron 6.7 millones (97 pesos cada ejemplar.) En los que yo mandé hacer, sólo 363 mil (30 pesos el ejemplar), con mejor calidad de papel e impresión y con Talleres Gráficos”, puntualiza.
n Una desproporcionada reacción provocó la nota sobre el reconocimiento de Constanza, la hija de Santiago Creel y Edith González, casi cuatro años después de nacida. Al mediodía de ayer, más de dos mil impactos en internet se registraban ya en la página del Senado y el panista había realizado siete enlaces en vivo con distintas radiodifusoras, según datos de comunicación social de la Cámara alta. Las solicitudes de entrevista eran tantas que podían compararse con las que se le pidieron a Luis Miguel por la presentación de su más reciente disco.
Creel hizo una brevísima declaración sobre el tema. “He reconocido que Constanza es mi hija. Aquí, con ustedes, quiero dar la cara de ello. También quiero pedirles su comprensión para que se respete el derecho a la vida privada de mi hija. Hemos convenido Edith y yo en no dar más declaraciones sobre este asunto”, dijo el presidente del Senado. La tardanza para reconocer a la hija ha servido para que sus enemigos golpeen políticamente al panista, pero en este espacio pensamos que “más vale tarde que nunca.”
Democracia en riesgo
Pablo Hiriart
Vida nacional
exonline.com
Lo anunció López Obrador ayer en Puebla: “Vamos ganando el debate 3-0” y, al final de los foros organizados por el Senado, él va a convocar a un referéndum que “también vamos a ganar”.
¿De veras exageraron cuando lo compararon con Pinochet y otros dictadores?
Ahí está López Obrador, retratado por él mismo.
Su palabra es la ley.
No es dictador, pero es un aspirante a serlo.
Si López Obrador dice que el Congreso no debe ser tomado en cuenta para legislar y que la Constitución —que no contempla la figura del referéndum— no importa, ¿qué es, sino un aspirante a dictador?
Así actúa ahora, que no tiene el control del Ejecutivo federal.
¿Cómo actuará si llega a tener en sus manos, algún día, el control del Ejército, de la PGR, del presupuesto y de la Suprema Corte?
Lo que varios comentaristas habíamos anticipado, en el sentido de que los foros organizados por el Senado, así de extensos para dar gusto al Frente Amplio Progresista, eran una tomadura de pelo para que AMLO reagrupara fuerzas y ganara tiempo, ha sido confirmado.
Ganar tiempo, y en buena medida lo ha conseguido, para “calentar el ambiente” con miras a su próximo golpe.
Ese golpe se va a dar amparado en su referéndum.
Van a volver a tomar las cámaras del Congreso. Harán movilizaciones en todo el país y convocarán a una huelga general.
Ya lo había anunciado López Obrador, y en eso está.
Esto va a ocurrir cuando se tenga que votar el dictamen de la reforma petrolera.
Hace unos días, Rosario Robles, ex líder nacional del PRD, citó a Cicerón para esclarecer el juego que realiza López Obrador:
“El que gana la calle, gana las leyes”, dijo.
Eso es lo que va a hacer, salga la reforma que salga.
Aunque se quiten las propuestas de permitir al sector privado construir ductos, de hacer plantas petroquímicas y de que los contratos se paguen según desempeño, López Obrador va a decir que hay privatización.
Lo que quiere es bronca.
Lo que quiere es imponer su ley. La ley de la calle.
En su discurso del domingo 6 de abril, en el Monumento a la Revolución, fue muy claro: “Asociación (que fue lo que él propuso como candidato) es privatización. Contratos con terceros es privatización. Autonomía de gestión (que es lo que proponen todos, incluidos los perredistas) es privatización”.
No hay manera de evitar su nueva escalada contra las instituciones democráticas.
Sin duda es muy importante debatir la propuesta energética que el Ejecutivo envió al Senado. Sí, pero fue un error no pactar por escrito con los representantes del PRD, el PT y Convergencia, que al final de los debates la reforma se pudiera dictaminar y votar. Y que se acepte el resultado de esa votación.
Parecería absurdo que en una democracia se pacte acatar el resultado de la decisión de la mayoría en una votación abierta en el Congreso.
En este caso, no lo es.
Enfrente no tienen a un demócrata, sino a un líder que trabaja para destruir la institucionalidad del país.
¿O todavía no saben con quién están tratando?
La mayoría de los ponentes que de buena fe acuden a aportar sus ideas al foro del Senado deberían saber que les están tomando el pelo.
Que ese ejercicio democrático en el cual participan no va a culminar con un dictamen elaborado y votado por quienes les están oyendo y se encuentran constitucionalmente facultados para ello: los legisladores.
Es que no va a ser así. O por lo menos no será sencillo.
Esa práctica elemental de una democracia se va a enfrentar con lo que diga López Obrador en la calle.
Él plantea el debate como un score de futbol. Él dice quién gana y quién pierde y, por encima de cualquier tipo de legalidad, va a hacer su referéndum y actuará en consecuencia.
¿Quién le va a aplicar la ley? Nadie. Y él lo sabe.
Lo que se prepara, de manera por demás anunciada, es una embestida contra la democracia en el país.
Contra eso hay que prepararse y no hacerse los sorprendidos cuando los suyos tomen las cámaras, los palacios legislativos de los estados y se apoderen de las calles.
Está cantado.
Lo que falta por verse es si las fuerzas democráticas logran hacer a un lado sus diferencias, sobre el tema petrolero y muchos otros, y advierten que está en riesgo un bien superior: la democracia.
Vida nacional
exonline.com
Lo anunció López Obrador ayer en Puebla: “Vamos ganando el debate 3-0” y, al final de los foros organizados por el Senado, él va a convocar a un referéndum que “también vamos a ganar”.
¿De veras exageraron cuando lo compararon con Pinochet y otros dictadores?
Ahí está López Obrador, retratado por él mismo.
Su palabra es la ley.
No es dictador, pero es un aspirante a serlo.
Si López Obrador dice que el Congreso no debe ser tomado en cuenta para legislar y que la Constitución —que no contempla la figura del referéndum— no importa, ¿qué es, sino un aspirante a dictador?
Así actúa ahora, que no tiene el control del Ejecutivo federal.
¿Cómo actuará si llega a tener en sus manos, algún día, el control del Ejército, de la PGR, del presupuesto y de la Suprema Corte?
Lo que varios comentaristas habíamos anticipado, en el sentido de que los foros organizados por el Senado, así de extensos para dar gusto al Frente Amplio Progresista, eran una tomadura de pelo para que AMLO reagrupara fuerzas y ganara tiempo, ha sido confirmado.
Ganar tiempo, y en buena medida lo ha conseguido, para “calentar el ambiente” con miras a su próximo golpe.
Ese golpe se va a dar amparado en su referéndum.
Van a volver a tomar las cámaras del Congreso. Harán movilizaciones en todo el país y convocarán a una huelga general.
Ya lo había anunciado López Obrador, y en eso está.
Esto va a ocurrir cuando se tenga que votar el dictamen de la reforma petrolera.
Hace unos días, Rosario Robles, ex líder nacional del PRD, citó a Cicerón para esclarecer el juego que realiza López Obrador:
“El que gana la calle, gana las leyes”, dijo.
Eso es lo que va a hacer, salga la reforma que salga.
Aunque se quiten las propuestas de permitir al sector privado construir ductos, de hacer plantas petroquímicas y de que los contratos se paguen según desempeño, López Obrador va a decir que hay privatización.
Lo que quiere es bronca.
Lo que quiere es imponer su ley. La ley de la calle.
En su discurso del domingo 6 de abril, en el Monumento a la Revolución, fue muy claro: “Asociación (que fue lo que él propuso como candidato) es privatización. Contratos con terceros es privatización. Autonomía de gestión (que es lo que proponen todos, incluidos los perredistas) es privatización”.
No hay manera de evitar su nueva escalada contra las instituciones democráticas.
Sin duda es muy importante debatir la propuesta energética que el Ejecutivo envió al Senado. Sí, pero fue un error no pactar por escrito con los representantes del PRD, el PT y Convergencia, que al final de los debates la reforma se pudiera dictaminar y votar. Y que se acepte el resultado de esa votación.
Parecería absurdo que en una democracia se pacte acatar el resultado de la decisión de la mayoría en una votación abierta en el Congreso.
En este caso, no lo es.
Enfrente no tienen a un demócrata, sino a un líder que trabaja para destruir la institucionalidad del país.
¿O todavía no saben con quién están tratando?
La mayoría de los ponentes que de buena fe acuden a aportar sus ideas al foro del Senado deberían saber que les están tomando el pelo.
Que ese ejercicio democrático en el cual participan no va a culminar con un dictamen elaborado y votado por quienes les están oyendo y se encuentran constitucionalmente facultados para ello: los legisladores.
Es que no va a ser así. O por lo menos no será sencillo.
Esa práctica elemental de una democracia se va a enfrentar con lo que diga López Obrador en la calle.
Él plantea el debate como un score de futbol. Él dice quién gana y quién pierde y, por encima de cualquier tipo de legalidad, va a hacer su referéndum y actuará en consecuencia.
¿Quién le va a aplicar la ley? Nadie. Y él lo sabe.
Lo que se prepara, de manera por demás anunciada, es una embestida contra la democracia en el país.
Contra eso hay que prepararse y no hacerse los sorprendidos cuando los suyos tomen las cámaras, los palacios legislativos de los estados y se apoderen de las calles.
Está cantado.
Lo que falta por verse es si las fuerzas democráticas logran hacer a un lado sus diferencias, sobre el tema petrolero y muchos otros, y advierten que está en riesgo un bien superior: la democracia.
Un joven mexicano se declara sorprendido tras recibir el premio Special Cannes 2008
México, 21 may (EFE).- El joven mexicano Alonso Álvarez dijo estar sorprendido por haber ganado hoy el premio Special Cannes 2008, otorgado en el marco del Short Film Corner, con su cortometraje "Historia de un letrero".
"Es increíble, nunca pensé que nos llevaríamos el primer premio; cuando hicimos este cortometraje no lo hicimos pensando en ganar premios, sino en hacerle llegar un mensaje a la gente", dijo el realizador a Efe.
Originario de la ciudad de Tampico (noreste de México), donde reside, el realizador destacó que no pudo asistir a Cannes porque no tiene recursos suficientes, pero indicó que eso fue lo de menos, pues su ausencia no fue un obstáculo para que se pudiera conocer el trabajo de todo su equipo.
"Historia de un letrero" es el segundo trabajo en la carrera de Álvarez y en este corto narra el encuentro de un publicista con un indigente.
Este cortometraje fue el único que participó en representación de México, y es una historia humana que carece de sangre, sexo o personajes extravagantes.
"Historia de un letrero" fue parte de una selección del Consejo Fílmico de Canadá que junto con el Short Film Corner de Cannes y el portal Youtube organizan el concurso de cortometrajes en línea.
El trabajo fue ganador entre 1.831 cortos de todo el mundo, de los cuales diez fueron subidos a la red y el del mexicano fue el más votado.
El premio del primer lugar consta de una cámara profesional y una computadora portátil, pero Álvarez afirma que el valor del premio radica en haber sido considerado como el mejor entre casi 2.000 que compitieron de todo el mundo.
El joven cineasta ya prepara su próximo trabajo bajo la producción de sus compatriotas, el actor Eduardo Verástegui y el productor Alejandro Monteverde, quienes también lo apoyaron en "La historia de un letrero".
"Es increíble, nunca pensé que nos llevaríamos el primer premio; cuando hicimos este cortometraje no lo hicimos pensando en ganar premios, sino en hacerle llegar un mensaje a la gente", dijo el realizador a Efe.
Originario de la ciudad de Tampico (noreste de México), donde reside, el realizador destacó que no pudo asistir a Cannes porque no tiene recursos suficientes, pero indicó que eso fue lo de menos, pues su ausencia no fue un obstáculo para que se pudiera conocer el trabajo de todo su equipo.
"Historia de un letrero" es el segundo trabajo en la carrera de Álvarez y en este corto narra el encuentro de un publicista con un indigente.
Este cortometraje fue el único que participó en representación de México, y es una historia humana que carece de sangre, sexo o personajes extravagantes.
"Historia de un letrero" fue parte de una selección del Consejo Fílmico de Canadá que junto con el Short Film Corner de Cannes y el portal Youtube organizan el concurso de cortometrajes en línea.
El trabajo fue ganador entre 1.831 cortos de todo el mundo, de los cuales diez fueron subidos a la red y el del mexicano fue el más votado.
El premio del primer lugar consta de una cámara profesional y una computadora portátil, pero Álvarez afirma que el valor del premio radica en haber sido considerado como el mejor entre casi 2.000 que compitieron de todo el mundo.
El joven cineasta ya prepara su próximo trabajo bajo la producción de sus compatriotas, el actor Eduardo Verástegui y el productor Alejandro Monteverde, quienes también lo apoyaron en "La historia de un letrero".
A quince años, ¿qué oculta Carlos Salinas del caso Posadas?
José J. Castellanos
josecast48@yahoo.com
Yo Influyo
El próximo sábado se cumplirán 15 años del magnicidio del Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, arzobispo de Guadalajara, primero de una serie de asesinatos que marcaron el final del gobierno de Carlos Salinas de Gortari, y que permanecen sin solución. Unos, por el evidente propósito de ocultar o desviar la atención sobre sus autores intelectuales, y otros, por errores evidentes en el tratamiento de los casos.
La forma como ocurrieron las cosas, y las figuras en torno a los mismos, han señalado el asesinato del Cardenal Posadas como un “crimen de Estado”, es decir, una acción planeada y ejecutada por altos mandos del Gobierno Mexicano que tuvieron interés en silenciar al cardenal, pues lo sabían conocedor de complicidades entre funcionarios y la red del narcotráfico en el país.
Dos abogados, Fernando Guzmán Pérez Peláez –actual secretario general de Gobierno del Estado de Jalisco–, y José Antonio Ortega Sánchez, han dado seguimiento continuo al caso, con la representación de la Arquidiócesis, siguiendo, paso a paso, las difíciles pistas que han llevado a descubrir vuelos anticipados desde el Hangar Presidencial, para atender un crimen que aún no había ocurrido, pero del cual, evidentemente, personalidades públicas, algunas de ellas dentro de la Procuraduría General de la República, estaban en conocimiento.
Este es el contenido del nuevo libro de estos investigadores, prologado por el Cardenal Juan Sandoval Íñiguez, titulado“La Verdad os hará libres. No tengan miedo. ¿Y el Homicidio del Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo”, que verá la luz esta semana.
Hoy, aunque no lo parezca, no existe un solo incriminado por el caso, pues a pesar de que se ha pretendido culpar a diversos sospechosos, la culpabilidad no ha sido probada.
También ha resultado evidente el fracaso, real o deliberado, de la Procuraduría General de la República, para esclarecer el asunto, con un interés precipitado por cerrarlo a pesar de que continuamente aparecen nuevas pruebas y testigos de lo ocurrido.
El primer interesado en crear confusión fue Jorge Carpizo, entonces procurador, con su fallido “nintendo” y las mentiras que inventó y que fueron enérgicamente refutadas en su momento por Patrocinio González Garrido, entonces secretario de Gobernación. Pese a ello y a ya no tener interés jurídico en el caso, Carpizo ha sido utilizado para intentar desacreditar la investigación.
Lo mismo ocurrió con un sobrino de Monseñor Luis Reynoso, a quien se ha usado dizque con el propósito de limpiar el nombre de su tío, para desmentir la afirmación del padre José Uribe Nieto de que ante él y con testigos, el entonces Obispo de Cuernavaca y miembro de la Comisión de investigación del asesinato de la Conferencia del Episcopado Mexicano, había dicho que el asesinato había sido “directo e intencional, que de ninguna manera fue por confusión o por las circunstancias sino (perpetrado) por sicarios foráneos para esto. Más aún, que él (el Obispo Cervantes) conocía el nombre del mandante, pero que no podía hablar ni decírselo a Usted”.
Pero lo más preocupante es que, llamado como testigo de la investigación, el ex presidente Carlos Salinas de Gortari respondió con la tesis sostenida en su libro “México un paso difícil a la modernidad”, sin que el Ministerio Público lo interrogara sobre hechos que debían ser de su conocimiento, sino con preguntas a modo y sin que la coadyuvancia del caso, que fue quien solicitó su testimonio, tuviera oportunidad de ser testigo y, menos aún, proponer preguntas pertinentes y necesarias.
Fue evidente la intención del entonces procurador Macedo de la Concha, de dar carpetazo al asunto, aunque no lo logró por la aparición continua de nuevas líneas de investigación.
Desde entonces, el ex presidente Carlos Salinas ha realizado reiteradas gestiones ante el Gobierno Federal para que, de una vez por todas, se cierre el caso. ¿Por qué tanto interés cuando es, precisamente en estos momentos de combate el narcotráfico, de la mayor importancia conocer cuáles fueron las redes y complicidades de autoridades con el narcotráfico y que fue el móvil del crimen?
Ya hemos visto como el ex presidente acomoda las cosas en su beneficio, pese a que existan testigos de que las cosas no son como las narra. ¿Por qué no se ahonda cuanto sea necesario para esclarecer el caso, de una vez por todas?
La guerra contra el narcotráfico está en su apogeo, pero no debe olvidarse que no basta destruir plantíos, interceptar cargamentos o detener a los sicarios. Son ya muchos los caídos de uno y otro lado, pero quienes permanecen intocadas son las cabezas que desde puestos públicos en el pasado con dirección de estos grupos o complicidad, impidieron que se combatiera a fondo el narcotráfico y que, aún hoy, pueden frustrar los esfuerzos del Gobierno Federal si no se llega hasta ellos.
josecast48@yahoo.com
Yo Influyo
El próximo sábado se cumplirán 15 años del magnicidio del Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo, arzobispo de Guadalajara, primero de una serie de asesinatos que marcaron el final del gobierno de Carlos Salinas de Gortari, y que permanecen sin solución. Unos, por el evidente propósito de ocultar o desviar la atención sobre sus autores intelectuales, y otros, por errores evidentes en el tratamiento de los casos.
La forma como ocurrieron las cosas, y las figuras en torno a los mismos, han señalado el asesinato del Cardenal Posadas como un “crimen de Estado”, es decir, una acción planeada y ejecutada por altos mandos del Gobierno Mexicano que tuvieron interés en silenciar al cardenal, pues lo sabían conocedor de complicidades entre funcionarios y la red del narcotráfico en el país.
Dos abogados, Fernando Guzmán Pérez Peláez –actual secretario general de Gobierno del Estado de Jalisco–, y José Antonio Ortega Sánchez, han dado seguimiento continuo al caso, con la representación de la Arquidiócesis, siguiendo, paso a paso, las difíciles pistas que han llevado a descubrir vuelos anticipados desde el Hangar Presidencial, para atender un crimen que aún no había ocurrido, pero del cual, evidentemente, personalidades públicas, algunas de ellas dentro de la Procuraduría General de la República, estaban en conocimiento.
Este es el contenido del nuevo libro de estos investigadores, prologado por el Cardenal Juan Sandoval Íñiguez, titulado“La Verdad os hará libres. No tengan miedo. ¿Y el Homicidio del Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo”, que verá la luz esta semana.
Hoy, aunque no lo parezca, no existe un solo incriminado por el caso, pues a pesar de que se ha pretendido culpar a diversos sospechosos, la culpabilidad no ha sido probada.
También ha resultado evidente el fracaso, real o deliberado, de la Procuraduría General de la República, para esclarecer el asunto, con un interés precipitado por cerrarlo a pesar de que continuamente aparecen nuevas pruebas y testigos de lo ocurrido.
El primer interesado en crear confusión fue Jorge Carpizo, entonces procurador, con su fallido “nintendo” y las mentiras que inventó y que fueron enérgicamente refutadas en su momento por Patrocinio González Garrido, entonces secretario de Gobernación. Pese a ello y a ya no tener interés jurídico en el caso, Carpizo ha sido utilizado para intentar desacreditar la investigación.
Lo mismo ocurrió con un sobrino de Monseñor Luis Reynoso, a quien se ha usado dizque con el propósito de limpiar el nombre de su tío, para desmentir la afirmación del padre José Uribe Nieto de que ante él y con testigos, el entonces Obispo de Cuernavaca y miembro de la Comisión de investigación del asesinato de la Conferencia del Episcopado Mexicano, había dicho que el asesinato había sido “directo e intencional, que de ninguna manera fue por confusión o por las circunstancias sino (perpetrado) por sicarios foráneos para esto. Más aún, que él (el Obispo Cervantes) conocía el nombre del mandante, pero que no podía hablar ni decírselo a Usted”.
Pero lo más preocupante es que, llamado como testigo de la investigación, el ex presidente Carlos Salinas de Gortari respondió con la tesis sostenida en su libro “México un paso difícil a la modernidad”, sin que el Ministerio Público lo interrogara sobre hechos que debían ser de su conocimiento, sino con preguntas a modo y sin que la coadyuvancia del caso, que fue quien solicitó su testimonio, tuviera oportunidad de ser testigo y, menos aún, proponer preguntas pertinentes y necesarias.
Fue evidente la intención del entonces procurador Macedo de la Concha, de dar carpetazo al asunto, aunque no lo logró por la aparición continua de nuevas líneas de investigación.
Desde entonces, el ex presidente Carlos Salinas ha realizado reiteradas gestiones ante el Gobierno Federal para que, de una vez por todas, se cierre el caso. ¿Por qué tanto interés cuando es, precisamente en estos momentos de combate el narcotráfico, de la mayor importancia conocer cuáles fueron las redes y complicidades de autoridades con el narcotráfico y que fue el móvil del crimen?
Ya hemos visto como el ex presidente acomoda las cosas en su beneficio, pese a que existan testigos de que las cosas no son como las narra. ¿Por qué no se ahonda cuanto sea necesario para esclarecer el caso, de una vez por todas?
La guerra contra el narcotráfico está en su apogeo, pero no debe olvidarse que no basta destruir plantíos, interceptar cargamentos o detener a los sicarios. Son ya muchos los caídos de uno y otro lado, pero quienes permanecen intocadas son las cabezas que desde puestos públicos en el pasado con dirección de estos grupos o complicidad, impidieron que se combatiera a fondo el narcotráfico y que, aún hoy, pueden frustrar los esfuerzos del Gobierno Federal si no se llega hasta ellos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)