diciembre 12, 2008

“Hoy sabemos que Silvia está con Dios”

En un breve comunicado, los padres de la joven pidieron a los medios de comunicación que respeten su privacidad y se abstengan de difundir especulaciones o información confidencial sobre el caso.

México / Milenio.- Al cumplirse un año y tres meses del secuestro de Silvia Vargas Escalera, la investigación sobre su paradero llegó a su fin. La familia confirmó que los restos encontrados en Bellavista 51, colonia Lomas de Padierna, en Tlalpan, pertenecen a la joven.

En un breve comunicado, la familia Vargas Escalera agradeció a los medios de comunicación la cobertura que recibió el caso, que fue fundamental para hallar los restos de la joven.

“Hoy sabemos que Silvia está con Dios. Les pedimos rezar por ella y por todas aquellas personas que viven el mismo sufrimiento que nos embargó desde el 10 de septiembre de 2007”, se señala en el texto. Se pide también a los medios de comunicación que respeten el duelo de la familia y se abstengan de publicar especulaciones sobre el caso.

El pasado 25 de agosto, Silvia Escalera, madre de la joven, clamó piedad a los secuestradores que se llevaron a su hija. En conferencia de prensa realizada sobre Paseo de la Reforma, en el DF, recordó a los captores de su hija “que el acuerdo seguía en pie, que tendrían su dinero” si devolvían a Silvia.

“De corazón: no hay rencor ni odio; no habrá represalias y sí recompensa para quienes nos den informes (...) Yo les doy lo que ustedes pidieron y ustedes me devuelven a mi hija. Dios los recompensará. Están a tiempo: ¡Gánense el cielo! ¡Devuélvanme a mi hija y todos quedamos en paz!”, dijo entonces. A continuación, la carta difundida por la familia:

“A los medios de comunicación y a todas aquellas personas de México y fuera de nuestras fronteras que nos han manifestado su apoyo, oraciones y solidaridad con motivo del secuestro de nuestra hija Silvia Vargas Escalera. Gracias.

“Hoy sabemos que Silvia está con Dios. Les pedimos rezar por ella y por todas aquellas personas que viven el mismo sufrimiento que nos embargó desde el 10 de septiembre del 2007. Desde lo más profundo de nuestro corazón, nuevamente gracias a la sociedad y a los medios: sin ustedes no hubiéramos encontrado a Silvia.

“Estamos seguros que entenderán nuestro silencio en estos momentos, ya que forma parte de nuestro adiós a Silvia.

“Asimismo, solicitamos a los medios su apoyo y comprensión nuevamente para que respeten nuestro duelo y privacidad, por lo que suplicamos se abstengan de difundir cualquier especulación o información detallada y confidencial que aumente nuestro dolor. Su familia y amigos deseamos recordar a Silvia como la última vez que estuvo con nosotros”.

Claves

Fiesta ensombrecida

• El cardenal Norberto Rivera Carrera aseguró que la confirmación de la muerte de Silvia Vargas Escalera ensombrece la celebración de la Virgen de Guadalupe.

• La joven Silvia Vargas Escalera fue “cobardemente asesinada” y es una víctima más de la ola de violencia que se vive en el país, señaló el prelado en un mensaje difundido por la noche.

• Un juez federal dictó auto de libertad —por falta de pruebas— a Lorena González Hernández, ex agente de la PFP, y a Gerardo Colín Reyes, su pareja sentimental, implicados en dos secuestros.

• Gerardo Colín abandonó la prisión; sin embargo, Lorena González continúa presa en la penitenciaria de Santa Martha Acatitla por su presunta responsabilidad en tres homicidios y en el secuestro de Fernando Martí.

Cronología

• Septiembre 10, 2007
Silvia fue secuestrada cuando se dirigía al colegio Alexander Bain, colonia Las Águilas, en el sur del DF. Sus captores pedían más de 2 millones de pesos a cambio de su libertad.

• Agosto 25, 2008
Luego de 11 meses, Silvia Escalera, madre de la joven de 19 años, hizo público el secuestro y pidió ayuda a la ciudadanía para recuperar a su hija.

• Noviembre 26
Nelson Vargas acusó a PGR y SSP federal de no detener a los plagiarios, a quienes identificó como Los Rojos, liderada por Raúl Ortiz González, hermano de Óscar, su ex chofer.

• Diciembre 5
La PGR cateó una casa de seguridad ubicada en la colonia Lomas de Padierna, en la delegación Tlalpan. En el lugar fueron hallados restos humanos.

• Diciembre 13
Familiares de Silvia le darán el último adiós a la joven en el Panteón Francés de San Joaquín. La ceremonia se realizará a las 10 horas y a las 13 habrá una misa.

Del miedo a limitar las tasas: Luis Pazos

Luis Miguel González
luismiguel.gonzalez@milenio.com
Caja Fuerte
Milenio

¿Poner un techo a las tasas de interés es inútil y equivalente a la pena de muerte? El presidente de la Condusef lo cree así. Luis Pazos fue tan parco en su comentario que no sabemos qué quiso decir. No tiene a su lado a Rubén Aguilar para que lo traduzca. Tampoco utilizó la página de la Condusef o la suya propia para aclarar su punto.

Eso es una pena porque se trata del máximo funcionario encargado de la protección de los usuarios de los servicios financieros. Es una lástima que nos deje con la sensación de que él cree que el papel del gobierno es el de mirar cómo el pez gordo se come al chico.

Luis Pazos sugiere buscar una reducción en los costos mediante la competencia, la información y el reordenamiento del mercado. No habla de plazos ni se refiere al largo tiempo que llevamos esperando que competencia, educación y reordenación den resultados. La privatización fue hace 17 años. La entrada plena de los bancos extranjeros lleva más de una década. Las tasas de tarjetas de crédito siguen siendo entre 6 y 12 veces mayores que la inflación. ¿Será que la falta de educación de los usuarios es la culpable?

Da lo mismo si el gato es negro o blanco, lo que importa es que atrape ratones. La frase corresponde a Den Xiaoping, el líder chino que fundó el capitalismo rojo. Viene a cuento porque puede servir para sacarnos del marasmo. Necesitamos una política de regulación al sistema bancario que dé resultados para los usuarios, la sociedad y los banqueros. En vez de eso tenemos una política llena de ideología. Tenemos reguladores que no creen en la regulación. Funcionarios públicos que piensan que es mejor que el gobierno se quede con los brazos cruzados en los temas grandes y se concentre en tareas de ornato. Está muy bien eso de la educación financiera, pero qué respuesta tenemos ante la persistencia de tarjetas que cobran CAT superiores a 50 por ciento.

“Es tarea del gobierno garantizar que no haya productos financieros dañinos para el consumidor”, asegura el premio Nobel Joseph Stiglitz en una famosa polémica sobre la regulación del sector financiero en Economist.

Poner un límite a las tasas de interés no es matar el mercado. Japón y Colombia lo hacen. Tampoco es equivalente a la pena de muerte, del mismo modo que ir al peluquero no significa matar el cabello.

El PRD, la UNAM y Lucía Morett

Pablo Hiriart
Vida Nacional
Excélsior

Ahora las máximas autoridades de la UNAM se suman al “escudo” en defensa de Lucía Morett.

¿Qué les pasa?

Obviamente, a nadie puede darle gusto que una persona de ultraderecha, abogado de las peores causas, amague con iniciar acciones judiciales contra alguien.

Pero si es por eso el “escudo protector”, están sobredimensionando al abogado que algo dijo sobre el tema tiempo atrás.

No, no va por ahí este montaje en torno a la señorita Morett.

Algo temen Rosario Ibarra de Piedra y destacados miembros del PRD, que nada tiene que ver con la integridad de Lucía Morett. El celo por “protegerla” parece estar asociado a lo que ella sabe y no debe decir.

Morett no era la estudiante inocente que llegó al campamento de las FARC en Ecuador en busca de material para su tesis profesional.

De hecho, hace años que Lucía Morett dejó la universidad.

El campamento de la narcoguerrilla al que llegó estaba rodeado de minas antipersonales. Ella entró en esos terrenos con autorización del alto mando de las FARC, que no se andan con niñerías de tesis profesionales.

Jorge Fernández Menéndez, el periodista mexicano que mejor conoce el funcionamiento de la narcoguerrilla, apunta en su libro Las FARC en México:

“Hemos visto, con el paso del tiempo, que la célula en que participaba Lucía Morett recibía entrenamiento militar y político, y era parte de una red en la que participaban otros actores, dentro y fuera de México. La propia información recogida en la computadora de Raúl Reyes… desnuda esas relaciones. Lucía Morett no regresó a México: de Ecuador fue recogida por uno de los más cercanos aliados de las FARC, el presidente nicaragüense Daniel Ortega, en un avión militar que la llevó a Managua, donde fue presentada públicamente por Daniel Ortega y su esposa”.

Los datos que Fernández Menéndez aporta en su libro llevan a la conclusión de que las FARC operan en México, que su principal aliada en el Congreso es Rosario Ibarra de Piedra, y que Lucía Morett milita en esa organización armada.

Ninguna pretensión hay en esta columna de que sea investigada, detenida o asediada. Sólo es preciso hacer ver que el montaje de su llegada a México para poner fin al “exilio”, es una mascarada de un sector del PRD, aliado a las FARC, y de la propia Morett.

En la prensa colombiana hay testimonios abundantes de la forma de operar de las FARC. En la de México, también.

Esa guerrilla se dedica al tráfico de drogas y al secuestro.

Tal vez el siguiente dato ilustre cómo se las gastan los compañeros de Morett: en 2007, 41 niños resultaron heridos por las minas antipersonales, de las FARC mientras que ocho murieron.

Es muy curioso que los defensores de Lucía Morett hayan pensado que estaría en peligro en México, y que era mejor para ella quedarse en Managua, en una de las casas de Daniel Ortega.

En la Comisión Interamericana de Derechos Humanos está abierto el expediente con el testimonio de la hijastra de Ortega, Zoilamérica, quien señala que a veces, por las noches, Ortega entraba a la habitación que ella compartía con su hermano: “procedía a separarme parte de la cobija de mi cuerpo, continuaba con manoseos…. Me decía que no hiciera ruido para no despertar a Rafael, y me decía: ya verás que con el tiempo esto te va a gustar”.

Ya como presidente, en su primer periodo, Ortega llegaba a casa a horas de trabajo, imprevistas, y “me indicaba que me moviera, que así sentiría rico. ¿Te gusta, verdad?, me decía, mientras yo permanecía en absoluto silencio sin tener fuerzas para llamar a mi mamá. El miedo no me dejaba.

“Sentía en la garganta resequedad, atorada y con temblores. Su contacto me transmitía intensos fríos y malestares, me provocaba asco y me creía sucia, muy sucia, pues sentía que un hombre al que rechazaba me ensuciaba toda. Comencé a bañarme muchas veces durante el día para lavar mi suciedad.”

¿A cuento de qué los legisladores del PRD fueron a Managua a acompañar a Morett en su regreso a México, y otros más la esperaron en el aeropuerto para formar un “escudo protector”?

¿Y qué hace la UNAM metida en ese asunto?

El clima en Poznan

José Sarukhán
jose.sarukhan@hotmail.com
Investigador del Instituto de Ecología de la UNAM
El Universal

En esta semana se lleva a cabo una reunión en Poznan, Polonia, preparatoria a la reunión de Copenhague en diciembre de 2009, la cual tiene como misión central definir la secuencia del actual Protocolo de Kioto. En ella deberán lograrse acuerdos en áreas críticas como soporte tecnológico, adaptación a cambio climático y deforestación, así como mecanismos de sostén del secretariado de Convenio Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático.

La reunión inició con cerca de 7 mil asistentes, marcada por las limitadas expectativas acerca del evento y con muestras de la tirantez reinante en el ambiente del tema, en gran medida propiciada por el tipo de relación establecida por la actual administración presidencial de EU.

El primer ministro polaco, anfitrión de la reunión y poco amigo de los niveles de exigencia de la Unión Europea sobre reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, se encontró en una posición por demás incómoda por la presión europea y por el grado de dependencia que la industria de su país tiene del carbón.

Se han sumado, además, rumores de las dificultades económicas de la política de reducción de emisiones de Gran Bretaña, especialmente en su efecto sobre la accesibilidad a energéticos en hogares con limitaciones económicas.

Adicionalmente, como también se esperaba, Estados Unidos no está teniendo una participación relevante, como lo había yo previsto en este espacio (EL UNIVERSAL, 14/XI/08), a pesar de las expectativas que existen al respecto. Lo que es claro es que es muy poco probable que la reunión de Poznan provea alguna respuesta concreta respecto de acciones de reducción de emisiones y otras medidas de compromisos definidos de las naciones participantes.

Sin embargo, ha habido una presencia relativamente más conspicua de China en la reunión, en la que un buen número de académicos de ese país han estado presentes y la participación de la delegación ha sido más propositiva y menos reactiva que anteriormente.

Lo que podría salir de esa reunión se resume en dos puntos. Por un lado, las decisiones sobre cuántas reuniones podrá haber el año próximo —y en qué fechas— en preparación a la reunión en Copenhagen, así como las formas de fondeo para sostener el secretariado de la reunión, que ya tiene a estas alturas algunos cientos de empleados. Por otro lado, las conversaciones “en el cuarto de al lado” podrán concretar (extraoficialmente) algunos esbozos de acercamiento y compromiso entre los grandes emisores de gases de invernadero con vistas a la reunión danesa.

Hay expectativas sobre la posible aparición en Poznan del ex vicepresidente Al Gore en la culminación de la reunión, especialmente respecto a si en esa ocasión Gore insinuará o avanzará algunas de las posiciones de la entrante administración encabezada por Barack Obama, dado que en estos días ha tenido lugar una reunión entre los dos. Es muy posible que la ruta de regulación de emisiones adoptada por su país esté mucho más cerca del enfoque conocido como cap and trade que de establecer impuestos a la emisión de carbono a la atmósfera.

México se ha labrado un lugar de respeto internacional en estas negociaciones, por lo que será indispensable definir una clara estrategia nacional de cambio climático para la siguiente década que nos gane reconocimiento y apoyos internacionales para lo que seguramente será una costosa y larga transición energética del país.

La Hermandad Ebrard-Peña Nieto

Ciro Gómez Leyva
gomezleyva@milenio.com
La historia en breve
Milenio

Tuve la oportunidad de entrevistar en la semana a Enrique Peña Nieto y Marcelo Ebrard. El mexiquense se sabe, se siente el personaje del 2008: así se mueve. El jefe de Gobierno del DF, en cambio, parece el agradecido sobreviviente de un naufragio que, sin embargo, cuenta las horas para zarpar de nuevo. Como sea, llegan al final del año como los personajes más atractivos para el 2009 y la carrera del 2012. Ambos lo saben. Muy bien.

Me llamó mucho la atención la deferencia con que se tratan. Parecen los padrinos de una Hermandad pasajera, pero obligada. Le pregunté a Peña Nieto que para cuándo veía el inevitable choque. Protestó, dijo que el hirviente espacio común de millones de habitantes no da para ambiciones tempranas. Aunque no se atrevió a afirmar que confiaba en que Ebrard le jugará limpio conforme avance el calendario de la sucesión. “Esa es una hipótesis que no puedo responder en este momento”, se disculpó. “Tenemos que trabajar sobre hechos y esos hechos dicen que trabajamos coordinadamente y bien”.

Le hice una pregunta parecida a Ebrard. “Tenemos muy buena relación”, coincidió. “Hemos trabajado bien. Lo que va a contar son los resultados, lo que hagas. Entonces, para qué desgastarte en deteriorar relaciones o en buscar conflictos que lo único que van a lograr es que se posterguen obras o no podamos resolver problemas comunes. Tenemos muy buena relación y así va a seguir”.

No soltaron más prenda. En ese tema son infranqueables. Los dos se saben el mayor capital electoral de sus partidos y calculan que lo mejor será seguir así, tirándose flores frías, esquivando el modelo Fox-López Obrador

Un rato nada más. Creo.

Por el derecho a una muerte digna

Fran Ruiz
fran@cronica.com.mx
La aldea global
La Crónica de Hoy

Hace dos años murió en Suiza el estadunidense Craig Ewert. Lo hizo acompañado de su mujer, de la que se despidió con un “te veré otra vez”, antes de beber un cóctel que primero lo adormeció, luego lo indujo al coma y pocos minutos después le provocó la muerte. Sus últimas palabras no dejan dudas de cuál era su voluntad final: “amo la vida, pero no puedo vivir en una tumba viviente”, y puso fin a su existencia con un simple “gracias”.

Si no hubiera existido ese vacío legal en la legislación suiza y se hubiera visto forzado a someterse a las leyes del Reino Unido, lugar donde residía, su muerte natural hubiera ocurrido en estos días, pero, como pronosticaron sus médicos, en medio de tormentosos dolores y con el cuerpo paralizado debido a la enfermedad degenerativa neuronal que padecía.

Su nombre acaba de saltar a los medios porque la cadena británica Sky emitió hace dos noches un video que recoge su muerte asistida, ocurrida en 2006. En las imágenes se ve a Craig sin apenas fuerzas para firmar su derecho a morir, pero con una serenidad en la mirada de quien sabe que va a ahorrarse sufrimiento y se lo va a ahorrar a su familia. Como dijo el propio Ewert antes de morir: “Optar por seguir vivo era lo mismo elegir el camino de la tortura”.

La emisión del video ha reabierto la ya vieja polémica entre los que defienden el derecho a la muerte asistida, en caso de enfermedad incurable, y los que sencillamente tachan la medida de asesinato.

Estos últimos olvidan, sin embargo, un matiz importante: una persona que muere asesinada desde luego no le ha pedido a su verdugo que la mate.

En el caso de la eutanasia es justo lo contrario: le está pidiendo, le está rogando a alguien que lo ayude a morir, porque una enfermedad lo acabará de todas maneras matando lentamente y rodeado de sufrimiento. Este ha sido el caso de Craig, pero también el de un joven inglés, Daniel James, quien tras quedar tetrapléjico durante un partido de rugby, pidió a sus padres que le ayudaran a morir; y así hicieron al calibrar que el sufrimiento que le producía a su hijo vivir en esas condiciones era mucho mayor que aceptar la muerte en plena flor de la vida.

Ni la esposa de Craig ni los padres de James han sido acusados, pese a que la legislación británica contempla hasta 14 años de cárcel por este delito.

Esta anomalía legal es con la que hay que acabar, porque lo que está en juego es sencillamente un derecho humano fundamental, el de el derecho a una muerte digna en caso de quedar en estado vegetativo o una enfermedad irreversible.

Es obsceno pensar que los mismos que admiten la muerte por compasión de un caballo herido se nieguen, por ejemplo, a permitir que la joven italiana Eluana, que lleva 17 años en coma conectada a una máquina, tenga una muerte en paz, como desean sus padres, tras dictaminar los médicos que no hay ninguna posibilidad de una mínima recuperación, y como ha dictaminado el Tribunal Supremo de Italia. Bastó que el Vaticano alertara hace un mes que desconectar a la joven sería un “monstruoso asesinato” para que ningún hospital se haya atrevido a cumplir la sentencia judicial.

Por todo esto, resalta aún más la decisión del Senado mexicano de aprobar una ley que permita a los enfermos terminales a solicitar la eutanasia pasiva; una decisión que ennoblece a los legisladores y pone a México a la vanguardia mundial en este derecho.

El dilema de ser o tener

Francisco Martín Moreno
fmartinmoreno@yahoo.com
Excélsior

Tanto tienes, tanto vales, dejó consignado el poeta para la eternidad. Si yo soy lo que tengo, y lo que tengo se pierde, entonces, ¿quién soy finalmente? Si no tengo nada, ¿no soy nadie?

Llorar por las catástrofes económicas equivale
a perderle el respeto al dolor.

Eduardo Galeano


Los sudarios no tienen bolsas, sentenció en alguna ocasión Andrew Melon y tenía, sin duda, toda la razón. ¿A dónde nos conduce esta carrera enloquecedora por tener y acaparar, consumir y poseer? ¿Es posible viajar simultáneamente a diez ciudades en diez diferentes aviones o ponerse tres trajes o usar varios sombreros, relojes, automóviles y camisas al mismo tiempo o comer cinco veces al día comida china, mexicana, francesa, alemana e italiana bebiendo al unísono whisky, vino, ginebra, cognac y tequila, o pasar la misma noche en cinco camas de cinco mansiones ubicadas en cinco países distintos con cinco o diez diferentes mujeres? La sed de poseer, la avaricia, debe tener un límite y más nos vale encontrarlo pronto antes de que la codicia acabe con lo mejor de nosotros.

Tanto tienes, tanto vales, dejó consignado el poeta para la eternidad. Si yo soy lo que tengo, y lo que tengo se pierde, entonces, ¿quién soy finalmente? Si no tengo nada, ¿no soy nadie? Al estar consciente de que puedo perder lo que tengo, es claro que vivo permanentemente preocupado. ¿Preocupado?, ¡qué va!, vivo devorado por la angustia de perder lo que soy, de perder mi dinero y mis bienes, mis vehículos de reconocimiento y aceptación social, los instrumentos que hicieron posible mi encumbramiento desde el cual ni siquiera puedo advertir el descuido de mi mundo interior, el descuido de mi ser que ya nadie puede arrebatarme, la fuente de mi seguridad personal que no está sujeta a las fluctuaciones del mercado: un mundo encantado inaccesible al dinero en el que a diario reafirmo mi identidad. No valgo por lo que tengo sino por lo que soy.

Como puedo perder lo que poseo, tengo miedo a los ladrones, a los secuestros, a las revoluciones, a los líderes de izquierda, a la competencia tecnificada y poderosa, a los cambios económicos, a la enfermedad, a la muerte, y tengo miedo a la libertad, al cambio, a lo desconocido. Por eso vivo permanentemente preocupado en relación ya no sólo con la pérdida de la salud sino con la pérdida de cualquier objeto. En consecuencia, me vuelvo temeroso, desconfiado, duro, suspicaz, solitario, impulsado por la necesidad de tener más para estar mejor protegido sin percatarme de que mientras más tengo más me aparto de mí mismo. Mis propiedades me apartan de mí y por lo tanto yo no soy yo mismo, soy en esencia un conjunto de bienes materiales y así termino mis días, sin saber ni haber descubierto los inmensos valores que existen en mi interior como sin duda existen en el interior de casi todas las personas. Termino mis días sin haber siquiera emprendido la búsqueda dentro de mí de otros tantos valores que me hubieran podido reportar mucha más felicidad que el dinero, si es que el dinero sirve para comprar la felicidad. La verdadera riqueza no implica el acaparamiento compulsivo de bienes sino el descubrimiento de nuestra personalidad, de nuestros auténticos apetitos, de nuestra vocación e identidad que al dar con ellos y encontrarlos justificamos ahora sí nuestra existencia, una búsqueda inevitable de la que nos aparta la lucha por el reconocimiento a través del dinero.

La actitud inherente al consumismo es devorarlo todo. Devorar vinos y licores, “devorar” ropas y perfumes, “devorar” automóviles, viajes, residencias, aparatos eléctricos, aviones y yates. “Devorar” todo, incluida la naturaleza, los bosques, los ríos, la flora y la fauna y sus criaturas. “Devorar” continentes, selvas y ciudades. El consumismo, otra forma compulsiva de devorar, tiene cualidades ambiguas: alivia transitoriamente la angustia de poseer, pero también requiere consumir más, porque por su carácter satisfactorio pronto se convierte nuevamente en codicia y egoísmo. Los consumidores modernos pueden identificarse con la siguiente fórmula: yo soy igual a lo que tengo y a lo que consumo y la gente me sigue y me “quiere” por esas razones, sin que mi auténtica persona, quien realmente soy, importe en este contexto social que me obnubila y me extravía en la búsqueda de mi verdadero ser. Caí en la trampa: tengo y doy para que me sigan porque en el fondo siento que por mí mismo no me seguiría nadie si no fuera por lo que representan mis bienes. ¿Soy mucho porque tengo mucho?

El placer no puede ser la única respuesta a la conducta humana. La búsqueda del placer conduce al egoísmo y el egoísmo implica que todo lo quiero para mí; que poseer y no compartir me da placer; que debo ser avaro porque mi meta es tener y que más soy cuanto más tengo. Que debo sentir antagonismo con todos mis semejantes: a mis clientes los debo engañar, a mis competidores los debo destruir, a mis obreros los debo explotar, a mi mujer le debo ser infiel. Nunca debo quedar satisfecho porque mis deseos no tienen límite. Ya lo decía un filósofo francés: puedes tenerlo todo en la vida… pero nada más.

fmartinmoreno@yahoo.com

El placer no puede ser la única respuesta a la conducta humana. La búsqueda del placer conduce al egoísmo y el egoísmo implica que todo lo quiero para mí; que poseer y no compartir me da placer.

Diputados: abusivos y cínicos

Ricardo Alemán
aleman2@prodigy.net.mx
Itinerario Político
El Universal

Cuando de “mamar” del presupuesto se trata, olvidan doctrina y principios
Terminarán los abusos cuando los ciudadanos tengan control de la reelección


Cada fin de año, o fin de legislatura, la historia se repite puntual. Las y los diputados nos sorprenden con sus abusos y su cinismo, claro, cuando de “mamar” del presupuesto se trata.

Hoy no fue la excepción. Reporta EL UNIVERSAL el abusivo escamoteo de los impuestos de la dieta de las y los diputados, en tanto que Reforma revela el aguinaldo de 252 mil pesos por cabeza que se autorregalaron los dizque representantes populares.

Pero debemos insistir en que ya no debía sorprender a nadie la reincidencia en esos abusos y el cinismo con el que responden los señores y las señoras legisladores. Porque cuando de llevarse una tajada del presupuesto público se trata, se les olvida la doctrina —sea del PRI, del PAN o delPRD—, los principios, la ética política; no se acuerdan de los tiempos en que desde la barricada de oposición lanzaban feroces consignas contra los “panzones y güevones” diputados…

¿Cuántos legisladores conocemos que, en un acto de congruencia, hayan dicho que no reciben las insultantes prebendas que les da ser representantes populares? Ni uno solo, por radical y furioso de izquierda o de derecha que sea. Y es que cuando de “mamar” del presupuesto se trata nadie dice no. Más aún, existen casos de quienes sangran económicamente a esas instituciones para financiar las causas políticas personalísimas. Eso sí, pregonan en las plazas una honestidad y valentía que nunca llevan a cabo.

La memoria sobre los abusos de las y los diputados federales da para mucho. Desde escándalos como el de los Rolex, pasando por la entrega de automóviles y computadoras; hasta el lujoso spa que se mandaron instalar los panistas, sin olvidar a los viajeros frecuentes, los millonarios bonos de marcha, la atención médica en costosos hospitales del extranjero y aquellos que en el extremo del cinismo le entregan a toda la parentela réplicas de la tarjeta IAVE para no pagar peaje en las carreteras del país.

Hoy el escándalo no es menor. Quedó exhibido a los ojos de todos que las diputadas y los diputados le escamotean los impuestos a su aguinaldo. Es decir, viven del dinero de todos y, en el cinismo y la desvergüenza infinita que les asiste, son incapaces de pagar sus propios impuestos. “Que se haga la voluntad de Dios, pero en los bueyes de mi compadre”.

Por esos abusos, y por esa desvergüenza y cinismo, las señoras y los señores diputados están colocados a la cola de la popularidad de todos los servidores públicos. Bueno, en recientes encuestas aparecen incluso por debajo de los policías, que ya es decir mucho. Existen otros que opinan que es tan bajo el nivel de credibilidad y confianza de los diputados, que si se voltea la escala de descrédito, es posible que aparezcan entre los primeros lugares de las diferentes clasificaciones de ladronzuelos. Y no se trata de una broma.

Pero el de los excesos y el cinismo de los diputados no es una tara genética propia de la política mexicana. En realidad la podemos ubicar como un vulgar abuso del poder. ¿Por qué? Porque existen muchas formas de acabar con esos abusos y su resultante de cinismo.

Los abusos y la impunidad que dejan ver las y los diputados tienen su origen en el carácter patrimonial de los puestos de elección popular, del que gozan los partidos políticos. Todos sabemos que para ser diputado —local o federal—, senador, alcalde, gobernador, jefe de gobierno o presidente, se debe contar con el respaldo de un partido político a través de la figura conocida como candidatura.

Los partidos políticos, sus dirigentes y dueños, son al mismo tiempo dueños de las candidaturas a todos los puestos de elección popular. Con ello, con esa propiedad privada, los jefes de partido esgrimen un control vertical y absoluto. ¿Por qué? Porque una candidatura a puesto de elección popular —el que sea—, en realidad es una poderosa zanahoria para conseguir sumisión, lealtad, sometimiento...

¿Cómo se puede romper con esa perversión política?

La mejor forma es a través de la reelección. ¿Por qué? Porque un puesto de elección popular que cuenta con la posibilidad de acceder a la reelección, le arrebata al partido y a su dirigencia el control de esa candidatura y su fin y/o continuidad queda en manos de los ciudadanos. Los electores son los que determinan si un diputado se va, si llega, si sigue en el cargo. ¿Cuántos de los actuales legisladores serían votados para un nuevo periodo? Ninguno o muy pocos. Con la reelección, no cometerían los abusos que cometen. Por eso debemos empujar por la reelección.

EN EL CAMINO

¿Y qué tal Ricardo Monreal ? Campeón del trapecio.