Consultor y profesor de la Universidad Iberoamericana
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El Economista

A partir de ahora y hasta febrero del próximo año se despedirán 500,000 empleados y en el 2012 y el 2013 a la otra mitad. Lo que se conoce de manera general, todavía no se ofrecen los detalles, es que el gobierno va a conceder 250,000 licencias para ejercer trabajo por cuenta propia en el 2011.
En ese mismo año se espera que 250,000 de los desocupados pasen al sector de las cooperativas o de las microempresas. La medida contempla que el gobierno conceda créditos bancarios a los nuevos empresarios y que éstos puedan vender sus productos y servicios a las dependencias gubernamentales.
La Central de Trabajadores de Cuba (CTC) dio a conocer la propuesta en un comunicado donde asegura: "Nuestro Estado no puede ni debe continuar manteniendo empresas, entidades productivas, de servicios y presupuestadas con plantillas infladas, y pérdidas que lastran la economía".
En el texto también se dice: "Es necesario elevar la producción y la calidad de los servicios, reducir los abultados gastos sociales y eliminar gratuidades indebidas y subsidios excesivos".
De los 11 millones de habitantes que tiene Cuba, hoy sólo 140,00 se dedican a negocios por cuenta propia. De cumplirse con lo que se ha dicho a finales del 2011, serían ya 640,00 y 1 millón 140,000 para el 2013.
En Cuba hay 5 millones de empelados y 4 millones trabajan para el gobierno. Las autoridades dicen que en el sector sobran 1 millón 400,000 trabajadores. A pesar de lo fuerte de la medida, la autoridad todavía conservaría 400,000 trabajadores innecesarios.
En el corto plazo esta decisión va a transformar la estructura laboral de la isla. Y si tienen éxito, es de suponer, se podrán generar todavía más autoempleos y empleos, lo que exigiría de nuevos permisos y se entraría a una espiral que resulta desconocida.
La medida contempla la formación de cooperativas más allá del sector agrícola y también la contratación de trabajo asalariado. Esta realidad, que está por construir, implica la creación de un nuevo sistema fiscal para gravar y regular las nuevas actividades económicas.
Hasta ahora se sabe que el gobierno ofrecerá a quienes se retiran, un mes de salario por cada 10 años de trabajo. No se conoce cómo se haría la selección de los que todavía permanecerán en el aparato burocrático.
El presidente Raúl Castro ya había anunciado que habría cambios en el sistema económico para ofrecer un mayor espacio a la participación de la iniciativa privada como medida de activar el aparato productivo y hacer frente a la crisis.
De los 11 millones de habitantes que tiene Cuba, hoy sólo 140,00 se dedican a negocios por cuenta propia.
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