Reforma

1. El PAN se fundó en 1939 por Gómez Morin y González Luna y tardó 61 años en alcanzar la Presidencia de la República. La apuesta, desde el inicio, fue por la democracia y el voto. Se forjó como un partido de hombres que vivían para la política, no de la política (según la célebre definición weberiana). Por eso se prepararon y templaron para una brega de eternidades. Eran los místicos del voto.
2. No deja de ser sintomático que el impulso fundamental para alcanzar el poder haya provenido de Manuel J. Clouthier y Vicente Fox. Ninguno de ellos era de formación panista. Su incursión en la política se debió a la expropiación de la banca en 1982 por José López Portillo.
3. De ahí que se pueda afirmar que el primer presidente panista, en sentido estricto, es Felipe Calderón. La mejor prueba está en la integración de los gabinetes de Fox y FCH: en el primero brillaron por su ausencia los panistas; el segundo se integró con panistas, que además eran del primer círculo del presidente de la República.
4. Hay que agregar el antecedente de que el PAN fue un factor clave en la transición democrática. Bajo la dirección de Luis H. Álvarez, Diego Fernández de Cevallos y Carlos Castillo Peraza, se convirtió en el interlocutor principal del gobierno de Salinas de Gortari. Fue en ese contexto que nacieron los principales soportes del régimen democrático: el IFE, la credencial de elector con fotografía y un padrón confiable.
5. Fue clave, también, en las grandes transformaciones que se efectuaron bajo la presidencia de Salinas de Gortari y permitieron la entrada de México al siglo XXI: la reforma de los artículos 3, 27 y 130, la privatización de la banca, la autonomía del Banco de México y la aprobación del Tratado de Libre Comercio.
6. El 2 de julio de 1989, Ernesto Ruffo ganó la gubernatura de Baja California. Antes había sido presidente municipal de Tijuana. Como Fox y Clouthier, no tenía una formación panista, venía del ámbito empresarial. Se inició, así, la era de la alternancia. Nunca antes se había reconocido la victoria de la oposición en un estado de la República.
7. El PAN enfrentó su primera experiencia con el desgaste que genera el ejercicio del poder en 2003. Perdió la elección intermedia y llegó al 2006 en una situación precaria: reinaba el desencanto. Las expectativas que había generado Fox durante su campaña no habían sido satisfechas.
8. La victoria de Felipe Calderón no fue un refrendo de los logros del gobierno anterior, fue resultado de la polarización de la contienda y del pavor que sentían amplios sectores de la población ante la posibilidad de que El Peje ganara la Presidencia. Aun así, la elección fue muy reñida.
9. Calderón alcanzó la Presidencia en el contexto de un pacto implícito con el PRI. Obviamente no fue un regalo, sino un cálculo frío y racional: ¿de qué les serviría a los priistas apoyar a AMLO y apostar por una crisis constitucional?
10. FCH cometió su primer gran error en 2007. Permutó prin- cipios y valores democráticos por una "reforma" fiscal inexistente. Los términos los impuso el senador Beltrones: sin reforma política no habría reforma fiscal. Pero no se trataba de una reforma, sino de una contrarreforma electoral. El PAN abdicaba de su bandera histórica.
11. Vino, luego, la reforma energética. Beltrones impuso, de nuevo, las coordenadas: no habría reforma constitucional ni se tolerarían los contratos de riesgo. Se trató de una reforma pírrica. Pero Calderón, lejos de aquilatarla, la publicitó y defendió como un gran logro.
12. Al poco tiempo, en el Tercer Informe de Gobierno, FCH diferenció las reformas posibles de las necesarias e hizo una autocrítica.
13. La estrategia de hacer alianzas con el PRD para parar el ascenso del PRI en 2010 se explica por varias razones: a) la molestia de FCH con los interlocutores del PRI, particularmente con Beltrones, que trabaron las reformas necesarias; b) la convicción de que el regreso del PRI era y es inaceptable, y el temor de pasar a la historia como el Presidente que le abrió las puertas de Los Pinos a los priistas.
14. Fue por eso que Calderón coqueteó con dos posibilidades: que el PAN lanzara un candidato ciudadano a la Presidencia de la República; que Ebrard fuese el candidato de la izquierda y en torno a él se pudiese forjar una coalición de facto. Los panistas, por un lado, y AMLO, por el otro, dieron al traste con ambas posibilidades.
15. FCH jugó entonces sus últimas cartas: apoyó a Cordero y aparentó oponerse a la candidatura de Josefina. Mató, así, dos pájaros un tiro: fortaleció la imagen de JVM como candidata independiente y favoreció el ascenso de su delfín para incluirlo, al final, en la lista de candidatos que llegarán al Senado.
16. Resulta ingenuo suponer que FCH se mantendrá al margen de la contienda electoral. La primera incursión fue ante los consejeros de Banamex, pero seguramente vendrán otras.
17. Paralelamente a esa estrategia, el PAN vive una crisis sin precedente. Larrazabal es el ejemplo paradigmático. No sólo no se le suspendió para abrir una investigación, sino se le postuló candidato a diputado.
18. Acción Nacional ya está inmerso en una crisis que tiene que ver con el ejercicio del poder. Se ha convertido en un partido de políticos profesionales, que viven de la política, que han probado y luchan por el poder con todos los medios a su alcance. El partido de notables de Gómez Morin y González Luna es cosa del pasado.
19. Así que, gane o pierda el 1o. de julio, el PAN deberá someterse a una cirugía mayor. Esa es la lección y prescripción que dejan 12 años de ejercicio del poder presidencial.
1 comentario:
Como aclaración: Ernesto Ruffo, antes de ser Gobernador de Baja California, fue presidente municipal de Ensenada, no de Tijuana.
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